¿Decisiones sin consecuencias? Es posible o es una fantasía más.
Hoy te quiero contar la historia de Alma Rosé, la violinista de Auschwitz, que tuvo que tomar decisiones difíciles por su propio bien y el de los miembros de la orquesta que dirigía dentro del campo de concentración.
Alma antes de llegar a Auschwitz ya era una destacada violinista a nivel de Europa, pero cuándo llegó al campo de concentración, se convirtió en el Kapo de su grupo y además cuenta la historia que contaba con una habitación privada, algo que no había ocurrido antes para un prisionero judío dentro del campo.
Alma Rosé, dirigía la orquesta dentro del campo de concentración de manera excepcional, también cuenta que tenía altos estándares y mucha exigencia para el resto de los músicos, ellos eran los encargados de entretener a los guardias nazis del campo y de tocar cada mañana al amanecer y atardecer cuando regresaban al campo de concentración el resto de los prisioneros de realizar trabajos forzados.
Alma hasta hoy es criticada, algunos dicen que sólo fue una oportunista que usó sus habilidades para tener privilegios dentro del campo de concentración, pero lo que si nadie puede negar y se lee en diferentes historias es que durante su tiempo como directora de la orquesta del campo de concentración ningún miembro de la orquesta fue asesinado y si alguno se enfermaba eran llevado para ser atendidos en el hospital del campo de concentración.
Además ella y los miembros de la orquesta tenían acceso a frutas, más allá de solo agua y pan.
Alma decidió usar sus talentos y habilidades para tener otro estándar de vida dentro del campo de concentración, que también otorgo protección a otros prisioneros, pero a pesar de haber beneficiado a otros con sus talentos hoy, a más de 70 años después y ya fallecida, sigue siendo criticada por lo que decidió.
Lo cual nos permite ver, que no hay decisión que no tenga consecuencia, no a todo el mundo le gustarán tus decisiones.
Tus decisiones tampoco beneficiaran a todo el mundo por más que lo desees, podrás impactar positivamente a tus más cercanos, pero no decidir actuar, también puede tener consecuencia nefastas para las personas en tu entorno.
Alma Rosé, con sus decisiones ayudó a quienes pudo, no tenia alcance para todos.
Y eso es lo que deberíamos tener presente, cada decisión siempre tiene consecuencias, procura poder ayudar a quienes más puedas con ellas, pero inevitablemente no llegarás a todos, así que suelta el deseo de ser el Dios salvador de todos a tu alrededor y empieza a tomar decisiones que puedan beneficiarte a ti y a otros grupos.
Porque siempre tendremos consecuencias.
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